martes, 6 de enero de 2009

Chaooos

Acabo de llegar de las famosas compras de Reyes Magos, me encanta hacerlas, más de madrugada y lo que más me gusta es ir a un mercado y comer cuanta garnacha se me antoje, los centros comerciales hechos un caos, me tocó ver a una señora en pijama y pantuflas, le quería tomar una foto pero se escapó demasiado rápido.

Son las 3 am y en 7 horas tengo que estar presentando un examen, cansancio y más cansancio.

Mientras me dirigía a mi casa, volteé a mi lado derecho y por la ventana del auto vi una luz enorme, un poco naranja, pensé que se trataba de algún adorno navideño bastante grande, pero seguí mi camino y después de unos metros esa luz seguía asomándose de entre las casas, me pareció algo extraño, entonces miré fijamente y se trataba de la luna, nunca había visto a la luna tan grande, luminosa y naranja, fue un espectáculo magistral, me dejó pasmada tanta belleza que cuando reaccioné para tomarle una foto ya era demasiado tarde, las casas la tapaban, me quedo con esa imagen en la memoria.

Ahora voy a prepararme café porque al parecer será una noche larga.